El reto de marzo era leer un libro que el título tuviera un nombre de mujer.

 

El último verano de Silvia Blanch de Lorena Franco

Lorena Franco nos sumerge en un pequeño pueblo montañoso donde nada es lo que parece y donde todos sus habitantes mienten.

Había visto tan buenas críticas de este libro que pensé que para el reto de Marzo me venía muy bien puesto que en el título lleva un nombre de mujer.

Un año después de la desaparición de Silvia Blanch, Alex, periodista de un periódico de Barcelona, es enviada a Montseny para entrevistar a la familia de la victima e intentar que reabran el caso. Alex se queda dos días en el pequeño pueblo, donde no ha sido muy bien recibida por sus habitantes, y empieza a hablar con unos y otras, conociendo a los familiares de Silvia. A Alex le intriga que es lo que le pasó a Silvia e intenta averiguarlo, pero pronto se da cuenta de que allí nadie dice la verdad y que todos mienten.

Una novela que te la lees en nada de tiempo, los capítulos son muy cortos y eso yo creo que hace que leas más. Está narrada por cada uno de los protagonistas, Alex, Jan, Silvia... algo muy curioso, porque te va contando cada uno de ellos sus vivencias, no hay un narrador, todos son narradores. Y lo mejor de todo es el final, va dando giros y más giros, que acabas mareado, todo indica hacía un sospechoso pero de pronto cambía, vas a por otro y vuelve a cambiar, es trepidante. 

Si te gusta el thriller, el suspense, el misterio es una muy buena opción para leer en un fin de semana.

Ficha Técnica